LA TRÍADA QUE PERMITE APRECIAR LA BELLEZA
El
sentido de proporción, en la operación de mayor síntesis de la
inteligencia humana, en su más elevada expresión se convierte en su paradigma,
el
sentido de armonía, como recurso de los creadores en las artes
en general. Sobre todo en las artes plásticas, incluida en éstas la
Arquitectura, hay autores que calculan las proporciones armónicas en su obra y
hay otros que las aplican intuitivamente.
Si bien cada persona tiene
sentido de
proporción, éste va paulatinamente desarrollándose con la experiencia,
según la formación y actividad que se tenga. En su más alto nivel, en la
creación de belleza, el
sentido de
armonía puede ser innato en los genios. Pero, en general, el
sentido de
proporción se va perfeccionando, percibiendo, creando o interpretando,
como se comprueba en el trabajo de profesionales, técnicos y artesanos, en muy
diferentes campos.
Al referirse el
sentido de cantidad
a los atributos de la inteligencia humana de poder
contar,
medir y pesar
hace, en progresión cualitativa, con los
sentidos de
proporción y armonía,
la tríada que caracteriza al entendimiento humano en su mejor desempeño, para
hacer relaciones correctas o bellas entre ideas y entre cosas.
El
sentido de la cantidad y el
sentido de proporción se muestran en
diversas manifestaciones en los orígenes de la
cultura humana, como se ha comprobado en testimonios materiales y lingüísticos
de remoto origen. De hecho,
cálculo
es la palabra que tiene mayor antigüedad en el lenguaje científico, al provenir
de
calculi, de la contabilidad de
hace once mil años, a fines del Paleolítico, en Mesopotamia. La palabra
canon, que expresa el concepto de proporción, viene de
qanu, de antiguos sistemas de medida de la misma región. Tanto
cálculo como
canon están presentes, en su parte de lexemas, con el mismo
sentido milenario, en todas las lenguas occidentales.
La aritmética y la geometría plana, ramas elementales
de las matemáticas, constituyen el campo donde es más fácil percibir, indagar,
calcular y expresar las proporciones que se resumen en Número de Oro y lo que se
deriva de él, para demostrar la presencia de la
proporción armónica en
Sobre la
proporción armónica, en el caso de la geometría plana un arquitecto propuso
que "para que un espacio dividido en
partes desiguales resulte agradable y estético, deberá haber entre la parte más
pequeña y la mayor la misma relación que entre la mayor y el todo"
(Vitruvio). Dicha correspondencia, manifiesta la presencia de un
canon que es
Φ (Fi), el módulo de la perfecta
armonía. Por eso, de todas las relaciones la más bella es la que se puede dar
entre las partes de una misma cosa. En cuanto a su valor numérico, para fines
prácticos en general no interesa conocer la expresión de
Φ con un mayor número de dígitos que
la que habitualmente se maneja: 1,618
como cifra significativa, como lo es
3,1416 –el valor de π– en
relación con las figuras y cuerpos geométricos relacionados con la
circunferencia.
Carlos Calvimontes Rojas
urbtecto@gmail.com